Son imperdibles las cabalgatas. La travesía comienza en el monturero, allí los paisanos ensillan los caballos y comienza el recorrido. Los recorridos por el valle, orientados por guías expertos y con el mejor equipamiento, conforman el gran distintivo que destaca a Dos Lunas como un destino de privilegio.

Hay cabalgatas para todos los niveles de experiencia (aún para huéspedes sin  experiencia alguna) y duraciones, según las preferencias de los pasajeros. Tenemos una variedad de caballos y una diversidad de escenarios, que nos permiten tener la flexibilidad requerida para que cada huésped disfrute de su cabalgata a su manera. Desde una cabalgata de un par de horas, hasta la posibilidad de cabalgar entre los cerros y los imponentes terrones durante varios días, disfrutando de los lugares más increíbles que la naturaleza puede presentar.

Las Cabalgatas

La cabalgata por los Terrones de Ongamira es la favorita, ideal para empezar a conocer la estancia y adaptarse a los caballos, como primer paso para intentar luego un paseo más largo. Consta de un recorrido por el valle hasta el pie de las formaciones rojizas que dan nombre a la zona, con la posibilidad de escalar a caballo uno de los terrones accediendo a una vista espectacular.

Para los aventureros, la cabalgata ideal es la del Cerro Colchequín. Ascendemos al Cerro a caballo por las mismas tierras en las que los indios Comechingones libraron su última batalla frente a los españoles. Se puede disfrutar de la vista panorámica del Valle de Ongamira y de la Estancia, con avistaje de águilas, cóndores y halcones peregrinos. En la cima del cerro, una de las pocas condoreras fuera de la Cordillera de los Andes donde a menudo pueden verse cóndores desde corta distancia.

“Perfecto equilibrio”

“Armonía de paisajes serranos potenciados con altas cabalgatas. Impresionantes la de la luna llena y la subida al cerro Colchiqui o Caralqueta, nunca vimos tantos cóndores juntos!!! Gracias Domingo! (…)”

Valbugras